Según el reglamento, las licencias deben ser acordadas en una votación especial. Mientras el peronismo presiona para expulsarlo de su banca, a la vice no le queda otra que abrir nuevamente el recinto
El senador entrerriano Edgardo Kueider, detenido en Paraguay desde la semana pasada por intentar cruzar la frontera con 200.000 dólares sin declarar, pidió formalmente su licencia: ahora el recinto debe votarla y definir si seguirá cobrando su dieta, al tiempo que el peronismo recluta los votos para expulsarlo directamente de su banca este jueves.
Unión por la Patria (UxP) -bloque al que inicialmente perteneció Kueider- hizo un pedido de sesión especial para este 12 de diciembre en pos de remover al senador por inhabilitación moral sobreviviente. Para conseguirlo, los 33 que conduce José Mayans deben adherir 15 bancas más, puesto que necesitan dos tercios.
Lo pueden hacer aunque no se encuentren en período ordinario de sesiones porque se trata de una cuestión de reglamento interno. En ese sentido, también vale aclarar que solamente la Cámara a la que corresponde debe expresarse -no hace falta que Diputados trate la expulsión del senador-.
Por su parte, el legislador de Unidad Federal este lunes envió el pedido de licencia que había anticipado hasta que se clarifique su proceso, aunque en el texto no especifica el período de tiempo que solicita. Actualmente se encuentra detenido en prisión domiciliaria en Villa Morra, Asunción. En declaraciones radiales, el juez que investiga su causa considero “inviable” que el entrerriano abandone el país.
Los artículos 25 y 26 del reglamento del Senado establecen que los pedidos de licencia deben ser votados en el recinto para decidir si serán con goce de dieta o sin él. También especifican que, en el caso de que el legislador se exceda del tiempo determinado -que, en este caso, no hay-, se pierde el derecho a la dieta.
La presidenta del cuerpo, Victoria Villarruel, se encuentra acorralada por el pedido de licencia y el pedido de sesión especial de UxP y no tendrá más opciones que abrir el recinto, a pesar de que le había prometido cerrarlo al jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
Con todo, se suma el hecho de que las extraordinarias que el vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció el miércoles pasado todavía siguen en un impass: al Senado le correspondería tratar la media sanción del proyecto de Ley Antimafias, para combatir el crimen organizado, y todavía queda pendiente de definir, si lo envían, a qué Cámara corresponderá tratar la modificación a la Ley de Fueros; debate que choca directamente con el caso de Kueider.