En la mesa de Mirtha Legrand, “Lilita” le pegó duro al gobierno de Macri por el espionaje ilegal, acusó a su propia coalición de haberle hecho a su familia un daño irreparable e involucró al excanciller Jorge Faurie. La persecución y la foto que le sacaron en Paraguay con un carapintada y el “no entendí” del ex presidente
Pese a que Comodoro Py se esmera en ayudar a que el espionaje ilegal sistemático de su gobierno parezca atribuible a un grupo de espías “cuentapropistas” que decidieron salir a hacer sus negocios con la política sin que nadie de los organismos del Estado en que trabajaban se diera cuenta, Mauricio Macri no logra evitar que las propias voces disidentes de Juntos por el Cambio denuncien que eso es poco probable y que ellos mismos fueron víctimas de la persecución ilegal emprendida desde el propio gobierno macrista.
Así fue que hace unos días Elisa Carrió se montó sobre el testimonio del periodista Hugo Alconada Mon, de La Nación, en el programa de Mirtha Legrand para denunciar que fue víctima del espionaje ilegal durante toda su carrera política pero principalmente durante el gobierno de Cambiemos, es decir el suyo, e involucró directamente ya no sólo a la AFI y a las fuerzas federales que dirigía Patricia Bullrich sino que también a un ministro del Poder Ejecutivo que encabezaba Macri.
Después de que “Lilita”, otrora fundadora de Cambiemos y ex diputada nacional pero líder de la Coalición Cívica, revalidara su denuncia como víctima del espionaje macrista, la exinterventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Cristina Caamaño confirmó que en la exSIDE había una foto de la líder Carrió, tomada en 2017, durante un viaje a Paraguay en una particular reunión con un carapintada.
En aquel momento Carrió también le pegaba duro al gobierno de Macri al decir que la vigilaban ilegalmente. Luego de eso, el ex presidente le armó un encuentro con Gustavo Arribas, su procesado amigo “acostumbrado a las trampas” que dirigía la AFI. Las explicaciones alcanzaron para que en aquel entonces “Lilita” bajara el tono.
Sin embargo, ahora Carrió puso sobre la mesa de nuevo el tema, pero con novedades. Cuando el periodista Alconada Mon recordó que había sido seguido y fotografiado por los espías del macrismo – causa de los agentes conocidos como Súper Mario Bros -, la ex diputada nacional no quiso ser menos y terminó generando un verdadero vendaval con el mismo tema que tanto costo le trajo a Facundo Manes hace semanas.
“Sufrí mucha persecución, pero nunca tanta como de parte de sectores de mi propio gobierno”, denunció Carrió, que ya había emprendido con el tema en anteriores oportunidades castigando a Arribas, Silvia Majdalani y también a Patricia Bullrich, pero que ahora acusó a Cambiemos de haberle hecho a su familia un daño irreparable e involucró en esto al excanciller Jorge Faurie.
Cuándo espiaron a Carrió
En una entrevista con la AM750, Caamaño confirmó que fue en su paso por la AFI que vio una foto y un parte de inteligencia que se habría confeccionado cuando Carrió viajó a Paraguay en 2017. “Yo creo que la deben haber seguido”, precisó.
Tras las declaraciones de Caamaño, en la AFI empezaron a intentar rastrear la imagen en cuestión, pero sería la que salió publicada en distintos medios en 2017.
Es que en abril de ese año, Carrió viajó a Paraguay y en una imagen que trascendió se la veía en una mesa al aire libre con Alejandro Camino, un mayor retirado de inteligencia del Ejército argentino. Se trataría de un ex militar que habría sido quien le proveyó cobertura al exsecretario de ejército Eduardo Alfonso mientras estuvo prófugo en Paraguay.
Alfonso fue después condenado a prisión perpetua por el homicidio de Antonio Domingo García, el secuestro de su compañera Beatriz Recchia y de su hijita Juliana, ocurridos en enero de 1977. Es decir, Alfonso fue condenado por genocida durante la última dictadura cívico militar.
Idas y vueltas en la interna
En ese momento ya habían trascendido que Carrió habría sido espiada en su viaje a Paraguay. Ella mantuvo una reunión con Arribas y el 29 de mayo de ese año tuiteó: “La AFI no hizo un seguimiento de mi viaje a Paraguay, Gustavo Arribas me presentó un informe satisfactorio”.
Sin embargo, en una entrevista posterior con el diario Clarín, denunció que la seguían y escuchaban sus conversaciones. En agosto de este año, ya con el Frente de Todos gobernando, Carrió había dicho que, durante el gobierno de Macri, ella sufrió amenazas y que le habían reforzado la seguridad con la Policía Federal Argentina (PFA), pero que dichos efectivos, como también dicho en 2019, la espiaban.
El entorno de Carrió salió a bajarle el tono a los dichos de la líder de la Coalición Cívica y Bullrich aprovechó para llevar agua para su molino y decir que, en realidad, la exdiputada tenía custodia de la Policía de la Ciudad. O sea la que conduce Horacio Rodríguez Larreta, su rival interno pensando en 2023.
Manes, hace semanas, volvió a poner sobre la mesa el tema del espionaje del macrismo hacia los propios, que ya había salido a la luz en la causa de los Súper Mario Bros, la que tiene entre sus víctimas a Rodríguez Larreta, Diego Santilli, Emilio Monzó, Nicolás Massot y a Florencia Macri, la hermana menor del expresidente.
Pese a la versión de los ultramacristas para defender a Macri y atacar a Manes, los hechos no fueron controvertidos por la justicia. O sea, la justicia jamás negó el espionaje ilegal desde el gobierno de Macri durante el gobierno de Macri. Lo que sí logró Macri es que, una vez que el expediente pasó de Lomas de Zamora a los tribunales de Comodoro Py, la Cámara Federal dijera de manera insólita que todo era obra y gracia de espías cuentapropistas y no parte de un plan digitado desde las estructuras más altas del macrismo. Los agentes confesaron haber recibido órdenes de la “jefatura”, pero la Justicia dijo que la “Jefatura” no dio ninguna orden. Raro.
A raíz de las heridas que reabrió Manes, Macri pidió en los tribunales de Comodoro Py que Casación termine de darle cierre a la causa del espionaje sobre las familias del ARA San Juan, en la que él fue procesado por el juez federal Martín Bava y después sobreseído por la Cámara Federal porteña.
“No entendí”, la respuesta de Macri
Consultado en TN acerca de las denuncias de Carrió, Macri la describió como “compañera de ruta de muchos años” pero aclaró que “a veces” le cuesta “entender algunas cosas que dice”.
“Ya esta altura no estoy para interpretar nada. Sólo trabajo por las ideas, los valores, por la convicción”, afirmó Macri, pero fue interrumpido directamente por el conductor del ciclo para pedirle que explique las denuncias de “Lilita” por el espionaje”.
Agregó Macri: “Faurie es un señor. No entendí, porque la verdad Faurie es un señor”. Y silencio.