Luego del hallazgo de un lote de vacunas compradas durante el gobierno de Mauricio Macri que se vencieron por no haber sido repartidas, Carla Vizzotti, secretaria de Acceso a la Salud, le respondió al ministro de Salud de ese entonces, Adolfo Rubinstein, al señalar que es “bastante notable” su postura de “no hacerse cargo de nada”
Ayer, Ginés González García, actual titular de la cartera sanitaria, denunció que encontraron cuatro millones de vacunas vencidas que estaban depositadas en un frigorífico, de lo cual se enteraron cuando les llegó la factura por el almacenaje en el lugar, ya que no había registro alguno de ello, según aseguró.
Ante esto, Rubinstein respondió que “no es bueno este pase de facturas que estamos viviendo” y se desligó de la responsabilidad al afirmar que en el momento de la compra él “no estaba en la gestión” del ministerio. Además, sugirió que “siempre es mejor equivocarse y que sobren”.
“No sé si es desconocimiento o falta a la verdad” sostuvo Vizzotti sobre el anterior titular del ministerio devenido en secretaría durante el macrismo, quien aseguró conocer la existencia de esas dosis.
La funcionaria indicó que “hay 2,2 millones de vacuna antigripal que se compraron en 2017 para 2018 que no se utilizaron, se compraron más de lo habitual, y están almacenadas, pagando el estibaje, desde ese momento” y agregó que “un embarque entero de triple bacteriana acelular ingresó a Aduana a fines de 2017, estuvieron en Aduana 7 meses, y nunca más se tocó ni se hizo ninguna gestión”.
“Salieron de la Aduana y nadie las tocó hasta que se vencieron” en un momento en que se distribuyó “el 65% de lo planificado” y eso “es 100%” de la gestión de Rubinstein “y si él no estaba al tanto, es preocupante”, lanzó la secretaria, en diálogo con Radio Nacional. En total, ya son 12 millones las vacunas vencidas compradas durante la gestión de Juntos por el Cambio que encontró el gobierno del Frente de Todos.
En este marco, la secretaria de Acceso a la Salud criticó la política de salud del gobierno de Macri: desde su perspectiva, hubo una “desconexión total de la política federal, de la articulación con las jurisdicciones, un retiro del Estado, hemos visto el año pasado un preocupante descenso, fuera de la pandemia, de las coberturas de vacunación”.
Para ella, en esa gestión “la salud no ha sido priorizada, más allá del nombre de Secretaría o Ministerio, no se le asignó presupuesto”.
Rubinstein había señalado ayer que “no es un hallazgo, hay un expediente de mayo de 2019 donde está relevado todo esto, es información pública, hay un expediente electrónico”. “Obvio que lo conocía, esta partida ya se sabía que había que destruirla”, pero dijo que “toma tiempo, es un residuo patológico, no la hace el ministerio de Salud” la destrucción.
El exfuncionario dijo que “2,2 millones (de vacunas) son de la campaña antigripal de 2016, una temporada muy difícil de gripe, de las más duras en décadas”, en la que “se hizo una compra anticipada para satisfacer el incremento de la demanda”. Para Rubinstein, “no va a ser la primera vez que se destruyen vacunas, esto a veces pasa porque lo que uno trata de privilegiar es que no falten vacunas”.