Chile es el octavo país del mundo con mayor número de contagios, acercándose a las estadísticas de España; y el tercero en Sudamérica, tras Brasil y Perú
Brasil pasó la barrera de los 50.000 muertos por COVID-19, en tanto Chile superó a Italia en cantidad de contagios, con más de 242.000 casos, los países de la región que junto a Perú tienen las situaciones más delicadas.
En medio de una crisis política que tiene al presidente Jair Bolsonaro enfrentado a los gobernadores, al Congreso y al Poder Judicial, Brasil registró ayer domingo 632 nuevos fallecidos y alcanzar los 50.608 decesos, a poco más de tres meses de la confirmación de la primera muerte en el país, según datos oficiales de las Secretarías regionales de Salud.
Brasil reportó además 17.304 nuevos contagios por la COVID-19, con lo que el total de infectados asciende ya a 1.084.000.
Esta semana, Brasil registró cinco jornadas consecutivas por encima de la barrera de los 1.000 muertos, lo que confirma al país como el segundo del mundo tanto en número de víctimas como de contagios, solo detrás de Estados Unidos.
Brasil prorroga cierre fronteras
El gobierno federal brasileño extendió la restricción a la entrada de extranjeros de cualquier nacionalidad en Brasil por otros 15 días, siguiendo la recomendación de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa).
La limitación se aplica a la entrada por carretera u otros medios terrestres, por aire o por transporte acuático.
El acto fue publicado en una edición adicional del Boletín Oficial el sábado por la noche y extiende el período de 30 días previsto en una ordenanza publicada el 22 de mayo.
La medida fue firmada por los ministros Walter Braga Netto (Casa Civil), André Mendonça (Justicia y Seguridad Pública), Tarcísio de Freitas (Infraestructura) y Eduardo Pazuello (Salud).
La ordenanza establece que la restricción no se aplica al brasileño, nacido o naturalizado; a inmigrantes con residencia permanente, por un período fijo o indefinido, en territorio brasileño; profesional extranjero en misión al servicio de una organización internacional; a pasajeros en tránsito internacional, siempre que no salgan del área internacional del aeropuerto y el país de destino admita su entrada; y a funcionarios extranjeros acreditados ante el gobierno brasileño. También hay excepciones para los extranjeros que son cónyuges, parejas, hijos, padres o curadores de brasileños, que tienen una entrada específicamente autorizada por el gobierno brasileño en vista del interés público o por razones humanitarias. Y también para el transporte de carga.
Chile
Al otro lado de la Cordillera de los Andes, las autoridades sanitarias de Chile informaron ayer domingo de 5.607 nuevos contagios por la COVID-19, lo que supone un total de 242.355 enfermos, cifra con la que supera a Italia (238.499 casos) en cuanto a personas infectadas por el coronavirus.
En Chile se registraron 184 nuevos fallecidos, sumando un balance de 4.479 muertes, a los que se añaden los 3.069 decesos sospechosos de COVID-19, alcanzando 7.548 personas muertas en el país como consecuencia de la pandemia.
Desde que se registró el primer caso del coronavirus en Chile el pasado 3 de marzo, las autoridades han remarcado en diversas ocasiones que el país se estaba preparando desde enero para afrontar la llegada de la pandemia.
Dos semanas después del primer caso el presidente Sebastián Piñera destacó en una entrevista con CNN Chile que el país, que entonces apenas tenía 238 casos positivos y ningún fallecido, estaba “mejor preparado que Italia”, que en la misma fecha tenía 35.713 contagios y 2.978 decesos.
Algo más de tres meses después la situación epidemiológica sigue empeorando a diario mientras que en Italia se consiguieron estabilizar los contagios, a pesar de que el país europeo tiene una población tres veces mayor.
Con las nuevas cifras Chile es el octavo país del mundo con mayor número de contagios, acercándose a las estadísticas de España; y el tercero en Sudamérica, tras Brasil y Perú.
El ministro de Salud chileno, Enrique Paris, señaló en la rueda de prensa diaria que se establecerá cuarentena domiciliaria desde la noche del martes 23 en las ciudades de Antofagasta, Tocopilla y Mejillones. El Gobierno descartó desde el comienzo la cuarentena a nivel nacional y eligió una estrategia “selectiva” decretando confinamiento o no en función de la evolución de los brotes en el país.
Estas nuevas localidades, ubicadas a más de 1.000 kilómetros al norte de Santiago, se suman a la región Metropolitana, en la que se ubica la capital; varias ciudades en la región de Valparaíso, incluyendo la ciudad homónima y Viña del Mar; y en el norte Iquique, Alto Hospicio, Pozo Almonte y Calama.
Chile se encuentra actualmente bajo estado de excepción por catástrofe y toque de queda nocturno, con las fronteras cerradas, al igual que las escuelas y los negocios que no son de primera necesidad.
El presidente Sebastián Piñera promulgó el domingo una ley que amplía el monto y la cobertura de las ayudas para hogares vulnerables para enfrentar la pandemia. La normativa está incluida dentro de una ley de emergencia aprobada en tiempo récord tras una gran acuerdo político para añadir otros 12.000 millones de dólares a un plan de ayuda estatal y de reactivación económica, con un horizonte de dos años, destinado a enfrentar los efectos del coronavirus, que podría significar una caída del PIB de hasta un 7,5% en 2020.