El líder Camioneros, Pablo Moyano, aseguró que “será uno de los más grandes de los últimos años”. Será la cuarta huelga que se realice contra la actual administración
El paro nacional convocado para mañana comenzará a sentirse con fuerza desde hoy al mediodía, cuando los gremios afiliados a las CTA y al Frente Sindical para el Modelo Nacional, que reúne a los sindicatos de extracción más combativa de la CGT y a Camioneros, cesen sus actividades desde las 12 para movilizarse a Plaza de Mayo en compañía de los principales movimientos sociales.
La convocatoria de esta tarde es el único acto programado para rechazar el rumbo económico adoptado por el Gobierno y exigir un giro copernicano sobre el Presupuesto 2019, que el sindicalismo insiste en catalogar como el “instrumento del ajuste” acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de las divisas que la administración Macri necesita para cubrir el “programa financiero” del próximo año. El triunvirato de la CGT, habiéndose asegurado la adhesión de los choferes de la Unión Tranviarios Automor, optó por concretar un parate de actividades pero sin convocar a movilización.
En la antesala de la cuarta huelga general contra el macrismo, Pablo Moyano advirtió que el 25-S será “uno de los más grandes de los últimos años”. En conferencia de prensa conjunta con los líderes de la CTA, Hugo Yasky, y la CTAA, Pablo Micheli, el secretario general adjunto de Camioneros, que renunció tiempo atrás a la secretaría gremial de la central obrera de Azopardo, fustigó el apoyo que ciertos gobernadores que ya se mostraron dispuestos ante la Casa Rosada a acompañar el proyecto oficial de Presupuesto 2019.
“Rechacen esto porque nos va a traer más hambre, más ajuste, más represión y más flexibilización laboral”, les transmitió Moyano, augurando una eventual ola de despidos en las administraciones provinciales y municipales.
Yasky, por su parte, cargó contra el Gobierno valiéndose del 9,6% de desempleo informado por el Indec y los altos niveles de subocupación. El docente advirtió que “más de dos millones de argentinos viven con hambre” y evaluó que el proyecto de Presupuesto solamente “va a empeorar las cosas”.
Pablo Micheli, en tanto, hizo un llamamiento a los trabajadores a movilizarse este lunes a Plaza de Mayo para demostrar “un rechazo tajante a este modelo económico”, al tiempo que reclamó aumentos de salarios y jubilaciones por encima de la inflación de este año.
Desde el mediodía, el centro porteño se verá convulsionado por la movilización de los diversos frentes que acompañarán la protesta frente a Casa de Gobierno, entre los que se cuentan el Frente Productivo Nacional, el Frente por el Trabajo y la Dignidad Milagro Sala, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y el Frente Barrial de la CTA. Desde las 20, las seis líneas del Subte y el Premetro interrumpirán su servicio, que se reanudará recién el miércoles.
Luego de un año y cuatro meses de gestión sin recibir huelgas, los tres paros anteriores contra Macri se dieron en el último año y medio. El primero, fue el 6 de abril de 2017, el segundo el 18 de diciembre de ese año y el tercero, durante 2018, el último 25 de junio.