La UIA alertó que se postergó ser el supermercado del mundo y reclamó reglas de juego claras
Los industriales criticaron con vehemencia la decisión del Gobierno de decretar la reducción de los reintegros a las exportaciones y enviaron una alerta: si avanza la decisión de Hacienda, se primarizará la economía y se reducirán los puestos de trabajo. Para los empresarios, la jugada implementada por el ministro Nicolás Dujovne atenta contra la seguridad jurídica y puso en blanco sobre negro la falta de incidencia del Ministerio de Producción en la mesa de decisión nacional.
Apenas conocida la medida, anunciada a primera hora de la mañana, la UIA comenzó a delinear una contundente respuesta con un paper en donde se hablaba de primarización, incumplimiento y crisis sectorial. “Estamos yendo a una primarización de la economía. Los reintegros son devoluciones de impuestos, pero ahora dicen que con la nueva ley fiscal bajarán impuestos sin siquiera haber empezado. Y en el medio, te dicen que tenés que exportar. ¿En dónde están las políticas a largo plazo?”, se lamentó el presidente de la UIA, Miguel Acevedo, en declaraciones a BAE Negocios.
En su comunicado de prensa, la entidad fabril volcó su “preocupación por el impacto negativo que tendrán para el conjunto del sector productivo”, y alertó que el decreto “tendrá consecuencias negativas para las industrias y las economías regionales”. “En pos de cumplir con metas fiscales, Argentina posterga el objetivo de convertirse en el supermercado del mundo mediante la agregación de valor, y la exportación de trabajo y conocimiento”, afirmó.
Según los especialistas, el decreto que le permitirá a la Nación ahorrar gracias a la industria $5.000 millones en lo que resta del año, y $29.000 en todo el 2019. “El problema, estructural y en la actual coyuntura financiera, de Argentina es la generación de dólares genuinos. Esto dificulta la posibilidad de revertir el saldo negativo de la cuenta corriente”, destacó el informe interno.
En línea salieron los bonaerenses de la UIPBA, que precisaron que “al día de hoy, los reintegros que van del 0.5% al 9.5%, solo cubren una parte de la incidencia impositiva que oscilan entre el 10% y 16%”, y señalaron que “la diferencia es un sobrecosto que asume el exportador industrial”. “Estamos aumentando ese costo de una manera significativa, contrariamente a la máxima del comercio internacional, la cual indica que no se pueden exportar impuestos si queremos desarrollar el mercado de exportaciones”, destacó un comunicado.
A la UIA se sumaron otras entidades. El presidente de los metalúrgicos de Camima, José Luis Ammaturo, admitió que “hay gran preocupación” entre las pymes del sector y advirtió que “el país necesita dólares y la exportación de productos industriales es la mejor forma para el ingreso de divisas, además de un gran fomento a la producción local”.
Mientras que el secretario general de CGERA, Raúl Zylbersztein, dijo que el decreto “destruirá puestos de trabajo y deteriorará la generación de riquezas”, y destacó que “a las exportaciones agropecuarias y a las mineras no se les pide ningún sacrificio para paliar el déficit fiscal y continúan con sus esquema de baja de retenciones”.