Las medidas tomadas ayer por el BCRA, en sintonía con Hacienda, para restringir la liquidez en la plaza local y reducir así la presión sobre el tipo de cambio permitieron que el peso argentino se moviera ayer a contramano de la depreciación que registraron las principales monedas de la región y el mundo. El real brasileño cayó un 0,8% contra el dólar, mientras que el peso mexicano perdió 0,55% en una jornada en la que los inversores optaron por escapar al riesgo
El dólar subió cerca de un 0,35% frente a una canasta de monedas de países emergentes ante la expectativa de un recrudecimiento de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, ya que este viernes entrarán en vigencia los nuevos aranceles anunciados en los últimos días tanto por Washington como Pekín.
A partir del 6 de julio, 1.102 productos chinos de industrias como la robótica, aeroespacial y automovilística serán golpeados por una nueva ola de aranceles estadounidenses por valor de u$s50.000 millones. La decisión fue respondida por China con medidas contra 545 artículos estadounidenses que tendrán a partir de ese día aranceles estimados en u$s34.000 millones.
La divisa estadounidense también se revalorizó ayer contra el euro y el yen. Al cierre de la sesión en el mercado neoyorquino, un dólar se cambiaba a 0,8591 euros, por encima de los 0,8560 euros del viernes pasado. Contra la moneda japonesa, en tanto, el dólar alcanzó un máximo en seis semanas: a 110,89 yenes por unidad.
