El famoso diario ultra conservador edita una nueva columna de opinión donde responsabiliza y estigmatiza a los migrantes de la delincuencia. A la vez que se queja por la utilización de los hospitales públicos y la educación. En sintonía con los discursos racistas del momento, La Nación aporta su grano de arena
Como no podía ser de otra manera, La Nación no se queda atrás en la estigmatización y los discursos racistas que atraviesa el espacio público.
Tanto es así que le dedica toda su editorial a criminalizar a la migración. “El jefe del bloque de senadores nacionales del justicialismo, Miguel Pichetto, dijo lo que está en la boca de crecientes sectores de la sociedad argentina y que pocos se atreven a manifestar: ‘Aquí no se expulsa a nadie’”, arranca.
Acto seguido afirma sin ningún tipo de rigurosidad o sustento que “el tema de la inmigración sin debida fiscalización se activa frente a la alarma social por los gravísimos índices de inseguridad que azotan a nuestra sociedad”.
Para el diario conservador hay un “elevado número de extranjeros, en particular latinoamericanos, en asociaciones criminales” donde hace énfasis en el narcotráfico. Pero sin ningún sustento de algún dato o estudio que pueda sostener tamaña afirmación. En verdad lo que busca el matutino es proseguir con la escalada racista.
Al tiempo que también se queja por los supuestos “los costos de la atención sanitaria de los inmigrantes”. En el mismo sentido, llama a tener algún tipo de arancel o “aporte” por venir a estudiar a nuestro país.
Por último, llama a “evitar la presencia tóxica de quienes pretenden prolongar aquí la trayectoria delictiva en sus países de origen ayudará a la sociedad a rehabilitarse de sus angustias diarias ante un estado de inseguridad que no ha conseguido mejorar el cambio de gobierno”.