Unos 17 mandatarios provinciales emitieron un duro comunicado con el objetivo de presionar para que la Corte resuelva el litigio de los recursos que reclama el gobierno porteño. Hoy habrá una reunión entre la Nación y CABA
Los gobernadores peronistas no desistirán de los recursos de sus provincias y pelearán por los fondos que reclama la Ciudad de Buenos Aires en concepto de coparticipación.
Anoche se reunieron casi en secreto 17 mandatarios provinciales para redactar un duro comunicado con el objetivo de presionar a la Corte Suprema de Justicia que debe dirimir el conflicto entre la Nación y CABA antes del 31 de mayo.
El texto titulado “El federalismo no se negocia” expresa la “profunda preocupación por la injerencia indebida por parte de la Corte Suprema” y “la acción declarativa de inconstitucionalidad interpuesta por la Ciudad” por los recursos “que no le corresponden”.
En sus argumentos, los gobernadores señalan que “la Ciudad Autónoma de Buenos Aires no es una provincia” y que “las provincias son preexistentes a la Nación y nuestra constitución se funda en pactos preexistentes”.
El escrito reclama terminar con “la discriminación centralista”. “Recibimos los menores subsidios por la energía que consumimos. Pagamos el combustible más caro. Nos hacemos cargo de nuestras fuerzas de seguridad y destinamos parte de nuestros escasos recursos para afrontar erogaciones que el privilegio centralista dispone”, culmina el comunicado.
La disputa por la coparticipación entre la Nación y la ciudad de Buenos Aires comenzó cuando el gobierno de Alberto Fernández quitó los fondos del traspaso de la Policía. Ambos partes tuvieron varias reuniones y audiencias de conciliación en la Justicia y en el ámbito gubernamental pero sin llegar a un acuerdo.
El argumento del Gobierno es que durante la gestión de Mauricio Macri, mediante un decreto inconsulto, se otorgó una coparticipación a la Ciudad que pasó de 1,4 % a un 3, 75%, pero “esos recursos que eran de todas las provincias” y “fueron asignados a de manera ilegítima sin tener aprobación del Congreso, como indica la Constitución Nacional”.
Las diferencias deberían zanjarse en la reunión política que mantendrán hoy el gobierno nacional y porteño encabezado en la Casa Rosada. Hoy vence el plazo ante la Corte Suprema para encontrar una salida política al conflicto.
Los 17 gobernadores que encabezan esta embestida contra la decisión que pueda tomar el máximo tribunales está compuesta de mandatarios de origen peronista y aliados. Ayer se reunieron en la sede del Consejo Federal de Inversiones (CFI), donde además pidieron ser “amicus curiae” del máximo tribunal, o sea ser terceros ajenos a la disputa que aportan argumentos u opiniones que pueden servir como elementos de juicio.
La lista de los firmantes la integran Axel Kicillof, gobernador de Buenos Aires; Raúl Jalil, gobernador de Catamarca; Jorge Capitanich, gobernador de Chaco; Mariano Arcioni, gobernador de Chubut; Gustavo Bordet, gobernador de Entre Ríos; Gildo Insfrán, gobernador de Formosa; Sergio Ziliotto, gobernador de La Pampa; Ricardo Quintela, gobernador de La Rioja; Oscar Herrera Ahuad, gobernador de Misiones; Gustavo Sáenz, gobernador de Salta; Sergio Uñac, gobernador de San Juan; Alberto Rodríguez Saá, gobernador de San Luis; Alicia Kirchner, gobernadora de Santa Cruz; Omar Perotti, gobernador de Santa Fe; Gerardo Zamora, gobernador de Santiago del Estero; Gustavo Melella, gobernador de Tierra del Fuego; Osvaldo Jaldo, gobernador de Tucumán.
