Con una inversión de $22 millones, el PAMI y el ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat comenzarán a financiar 100 proyectos del programa Casa Propia-Casa Activa. Planean construir 32.000, aún no hay fecha de finalización. Cuáles son los requisitos para que un adulto mayor pueda acceder a una vivienda gratis
El futuro de las personas mayores es un gran desafío. Más aún si no cuentan con su propia vivienda. Hasta ahora los afiliados al PAMI pueden acceder a 560 residencias de larga estadía en todo el país, de las cuales sólo cinco son propias. Albergan a gente con enfermedades severas, leves y a también a muchos que están bien, pero no tienen hogar. Con estos datos en la mano, nace un nuevo concepto de vivienda colaborativa.
El proyecto Casa Propia – Casa Activa fue presentado por el PAMI junto con el ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat. Será un programa nacional que en cada complejo tendrá 20 viviendas individuales y 12 compartidas entre dos, con una superficie promedio de 38,49 m2 y 50,19 m2 respectivamente. Van a tener espacios comunes para disfrutar e intercambiar y un Centro de Día para tener actividades terapéuticas de estimulación cognitiva, actividades físicas y arteterapia, entre otras. A este Centro podrán concurrir todas las personas del barrio.
El programa es ambicioso, se propone construir 3.200 viviendas con espacios comunes con una inversión de $22.000 millones. El Estado Nacional, a través de PAMI y el ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat financiará los primeros 100 proyectos para personas mayores de 60 años en todas las provincias del país con participación de todos los gobiernos locales.
Santiago Maggiotti, Secretario de Habitat nacional, señaló: “No son créditos, sino que las viviendas se entregarán en comodato, y los beneficiarios pagarán por el mantenimiento de áreas comunes, algo similar a una expensa. Los municipios en donde se construyan los complejos habitacionales serán quienes fijen cuánto abonarán, y PAMI, de acuerdo a una minuciosa selección, será quien designe a qué personas entregarle la vivienda”.
Mónica Roque es Secretaria general de Derechos Humanos, gerontología comunitaria, género y políticas de cuidados. Cómo experta en el tema, detesta hablar de geriátricos y da una explicación: “Geriátrico viene de geriatría, que trabaja asumiendo a la vejez como una enfermedad. Cómo no toda la gente está enferma, preferimos llamarlos residencias de larga estadía”.
No se trata sólo del ahorro de un alquiler, es darle una vivienda digna en comodato a los que lo necesitan. “El concepto de vivienda compartida no sólo resuelve un problema habitacional, ayuda a luchar contra la soledad, el aislamiento, uno empieza a perder a los pares, amigos y la gran dificultad es que la gente se va quedando con menos redes, este proyecto impulsa nuevas redes solidarias de apoyo”, señaló Roque.
El proyecto es ambicioso e ilusiona, aunque todavía no hay fechas concretas de finalización. Es un trabajo conjunto con municipios para ver en qué terrenos comenzar a construirlos. “Estas viviendas reemplazan a los mal llamados ‘geriátricos. Las personas son sujetos de derechos y tienen que vivir en comunidad. Hoy la única alternativa es una residencia y está mal. Si la persona no tiene casa, hay que darle una casa. Los que sean derivados a residencias debe ser porque realmente necesitan más cuidados complejos. Hay mucha gente sin problema viviendo en la residencia porque no había otra opción. Esto es una respuesta social, para retrasar y evitar una internación en una residencia. No hay que asociar la vejez a una enfermedad”.
Requisitos para acceder al programa Casa Propia-Casa Activa
Roque confía que los primeros estarán listos en un año, a más tardar. La pregunta es quiénes podrán y cómo se podrá acceder. “Es para toda persona mayor 60 años que no tenga vivienda y que cobre una jubilación que no sea superior a una jubilación y media. Un 75% del cupo será destinado a afiliados del PAMI y un 25% para gente que tenga otra obra social y también lo necesite. Es para gente que requiera de una dependencia leve o moderada, los más graves o que requieran mayores cuidados irán a residencias. Se entregará gratis en comodato”, señaló.
La directora ejecutiva de la obra social, Luana Volnovich, señaló: “El modelo de viviendas colaborativas es una revolución gerontológica. Es un complejo de viviendas para personas mayores pionero en Latinoamérica. Implican un cambio de paradigma, en una sociedad que opera desde el descarte. El Estado debe liderar la búsqueda por una vejez activa, cuidada y en comunidad y pensar en nuevos dispositivos y políticas para una población que cada vez vive más. Queremos cambiar la visión y terminar con esta idea de que la vejez es el fin, porque se trata de una oportunidad de iniciar una nueva etapa”.
Cómo se dividen las tareas: la financiación de las primeras 100 obras la hará el ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat. El PAMI se encargará de equipar y financiar las prestaciones el funcionamiento del Centro de Día. Los entes ejecutores (provincias y o los municipios) ejecutarán las obras y administrarán el funcionamiento de las viviendas, espacios comunes y Centros de Día.
Las ciudades que ya presentaron proyectos para edificar los complejos son las siguientes: San Fernando del Valle de Catamarca, Comodoro Rivadavia (Chubut), Palpalá (Jujuy), Santa Rosa (La Pampa), San Luis (Capital), Río Gallegos (Santa Cruz), Santa Fe (Capital), Santiago del Estero (Capital) y Mendoza (Capital), entre otras. En el AMBA, entre los municipios se adhirieron Ensenada, Almirante Brown, Berazategui, Escobar, Florencio Varela, General Rodríguez, Presidente Perón y San Vicente. Se espera que más intendentes se sumen a la iniciativa estatal.