La superficie total es comparable a la extensión de tierra urbanizada. Pese a que se proyecta un aumento de entre un 50 y un 70% de infraestructura, alertan que las cifras subestiman la realidad
Un estudio cartográfico concluyó que aproximadamente 30 mil kilómetros cuadrados del océano fueron modificados por la acción humana. El área equivale al 0,008% del océano, pero podría calcularse en 0,5% si se incluyen los efectos del flujo hacia las áreas circundantes, como por ejemplo por cambios en el flujo del agua y la contaminación.
La extensión del océano modificado por la construcción humana es, proporcionalmente, comparable a la extensión de la tierra urbanizada y mayor que el área global de algunos hábitats marinos naturales, como los bosques de manglares y los lechos de pastos marinos.
El estudio fue realizado por la Facultad de Ciencias de la Vida y el Medio Ambiente de la Universidad de Sydney y el Instituto de Ciencias Marinas de Sydney, y fue dirigido por la doctora Ana Bugnot. La experta explicó que “desde mediados del siglo XX, sin embargo, el desarrollo de los océanos se ha acelerado y ha producido resultados tanto positivos como negativos”.
“Por ejemplo, mientras que los arrecifes artificiales se han utilizado como ‘hábitat de sacrificio’ para impulsar el turismo y disuadir la pesca, esta infraestructura también puede afectar hábitats naturales sensibles como pastos marinos, marismas y marismas, lo que en consecuencia afecta la calidad del agua”, graficó.
La modificación oceánica incluye:
- áreas afectadas por túneles y puentes
- infraestructura para la extracción de energía: plataformas de petróleo y gas, parques eólicos, entre otros
- transporte marítimo: puertos y marinas
- infraestructura de acuicultura
- arrecifes artificiales
“El desarrollo marino ocurre principalmente en áreas costeras, los ambientes oceánicos con mayor biodiversidad y biológicamente productivos”, agregó la doctora Bugnot.
El futuro de los océanos
Pese a que el desarrollo de los océanos “ha estado en curso desde antes del 2000 a.C.”, los número para el futuro “son alarmantes”. Bugnot dijo que, pese a que las previsiones apuntan a un aumento de entre un 50 y un 70% de infraestructura para la energía y acuicultura, eso es una “subestimación”.
“Hay una escasez de información sobre el desarrollo de los océanos, debido a la mala regulación de esto en muchas partes del mundo”, advirtió. “Hay una necesidad urgente de mejorar la gestión de los ambientes marinos. Esperamos que nuestro estudio impulse a una mayor acción las iniciativas nacionales e internacionales, como la directiva marco sobre la Estrategia Marina de la Unión Europea”, destacó Bugnot.
Los investigadores atribuyeron la expansión proyectada a la creciente necesidad de las personas de contar con defensas contra la erosión costera y las inundaciones debido al aumento del nivel del mar y el cambio climático, así como a sus necesidades de transporte, extracción de energía y recreación.