El 40 por ciento de los votos que el presidente Mauricio Macri obtuvo en las elecciones generales puso en jaque el nuevo armado político que algunos dentro del oficialismo se apresuraron a esbozar tras la contundente derrota de las PASO
El día después de los comicios dejó al desnudo que detrás de la discusión sobre el futuro de la alianza Juntos por el Cambio está la disputa por el liderazgo político de la oposición. Hasta ese momento, tanto dirigentes radicales como peronistas y macristas de la coalición gobernante se ilusionaban con que el jefe de Estado dejaría la escena pública a partir del 10 de diciembre para reposar en España o algún otro destino en el exterior, junto a su esposa, Juliana Awada; y su hija menor, Antonia; para dar paso a al llamado “post macrismo”. Las multitudinarias movilizaciones de la caravana del “Sí, se puede” apenas hicieron tambalear esa idea, pero los más de dos millones de votos que Macri sumó cambiaron la postura de varios.
“Mauricio está bien posicionado y tiene las condiciones para liderar la oposición”, dijo a BAE Negocios uno de los principales impulsores de renovar el espacio político que PRO, la UCR y la Coalición Cívica inauguraron en 2015. Sin embargo, también aclaró que si bien “tener el 40 por ciento de los votos no es poca cosa, el liderazgo de la oposición es un lugar que hay que ganarse”.
A diferencia de la hasta ayer líder de la Coalición Cívica- ARI, Elisa Carrió, que renunció a su banca y a la política partidaria y aseguró que “son los pueblos los que eligen los líderes, no los políticos”, el ex candidato a vicepresidente del oficialismo, Miguél Pichetto, respaldó a Macri para que sea quien ocupe el rol de referente de la oposición. “El domingo se ha reafirmado un liderazgo político en la figura del Presidente”, apuntó el senador peronista, a la salida de la reunión de Mesa de Acción Política en la Casa Rosada. A su lado, los jefes de los interbloques del oficialismo de Diputados y el Senado, Mario Negri y Luis Naidenoff, asentían con la cabeza.
Uno de los funcionarios de mayor confianza del mandatario manifestó a este diario que “Mauricio queda como el jefe claro de la oposición porque ningún otro dirigente sacó más votos en las elecciones generales”. Sin embargo, desde el sector de Juntos por el Cambio que puja por ser una “oposición constructiva” -encabezada por el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal; el mandatario porteño, Horacio Rodríguez Larreta; el presidente de la UCR, Alfredo Cornejo; el ministro del Interior, Rogelio Frigerio; y el senador electo Martín Lousteau- creen que es necesario buscar un nuevo liderazgo, aun cuando algunos apuestan por avanzar en una mayor horizontalidad en la toma de decisiones.
Además del mandatario, uno de los que mejor posicionado quedó luego de los comicios últimos es Rodríguez Larreta, que consiguió ser reelecto por más del 55 por ciento de los votos. No obstante su triunfo quedó acotado a los límites de la Ciudad, frente al 40 por ciento que Macri alcanzó a nivel nacional. Para algunos la buena performance que el jefe de Estado logró -en el marco de una derrota- obedece a los cambios que se hicieron en la campaña, en particular a la multiplicidad de actos por el país, pero principalmente a que aglutinó el voto antiperonista, al que varios aspiran representar apenas asuma el presidente electo, Alberto Fernández.