El fenómeno se extiende con rapidez a más regiones en varios continentes. Ahora, es el caso de Corea del Norte que padece este año una extrema escasez de lluvias, que iguala lo mínimo de los últimos 37 años, una cifra que aumenta el riesgo de complicar más cultivos y agravar la emergencia alimentaria del país
Incluso, desde la Organización de las Naciones Unidas (ONU), advierten que este escenario drástico ya afecta al 40% de la población del país asiático. De acuerdo a los informes de la agencia estatal de noticias KCNA, “la precipitaciones llegaron a 54,4 milímetros, entre lluvia y nieve, en el período de enero a principios de mayo, la cantidad más baja registrada desde 1982, cuando los niveles fueron de 51,2 mm”.
El reporte de KCNA, además de coincidir con los informes de los representantes de la ONU sobre la gravedad de la situación alimenticia del país, es consistente con un informe de una organización sin fines de lucro con sede en Estados Unidos -Amigos Cristianos de Corea- cuyo equipo ya realizó varias advertencias sobre este duro escenario.
“Durante nuestros viajes, escuchamos en muchos centros de salud que en 2018, el maíz tuvo una cosecha con grandes pérdidas (40-50% menos) debido a la sequía y las altas temperaturas prolongadas el verano pasado. Además, hubo pocas nevadas, por lo que las condiciones de sequía continuaron hasta la primavera y el período de siembra”, detallaron. “Los lechos de los ríos -según el informe de la ONG estadounidense- están en su mayoría secos o con agua a niveles muy bajos en las regiones en que viajamos”, informaron.
En tanto, las dos agencias de la ONU, el Programa Mundial de Alimentos y la FAO, señalaron en un informe conjunto sobre Corea del Norte que desde 2008 la producción de cereales no se encontraba en niveles tan bajos. Para graficar el problema, cerca del 40% de la población del país ya necesita ayuda alimentaria. “De acá a septiembre, si no se toman medidas humanitarias apropiadas y urgentes, la crisis será peor”.
Su vecino, Corea del Sur, ya se encuentra en un plan para enviar alimentos y necesidades básicas, como parte de los esfuerzos para mantener un canal de diálogo abierto con Pyongyang, cuando las conversaciones sobre la desnuclearización entre Corea del Norte y Estados Unidos están ahora estancadas, cita la agencia ANSA.
Los fenómenos climáticos alrededor del mundo son cada vez más extremos, entre ellos, la sequía. Así como en Corea la falta de lluvias produce tremendos inconvenientes en la producción de alimentos, en otras regiones del planeta las inundaciones tienen la misma consecuencia: arruinar tierras y arrasar cultivos.