Hacienda, Finanzas, Interior, Producción y BCRA, las principales reuniones
El Fondo Monetario Internacional (FMI) dará comienzo desde hoy, cuando sostenga una reunión con el Ministerio de Hacienda, a la segunda misión del Artículo IV desde que el Gobierno argentina retomó la relación con el organismo financiero. El jefe de la comitiva, Roberto Cardarelli, mantendrá encuentros durante dos semanas en las que recolectará datos de la economía argentina para la elaboración del informe, que se publicaría en las últimas semanas del año.
Las reuniones tendrán un perfil técnico, aunque se darán casualmente en el marco de los anuncios que hará hoy la Casa Rosada respecto a las reformas económicas que vendrán: tributaria, de obra pública y laboral. Como suelen realizar la comitiva del organismo en todas sus visitas del Artículo IV, los enviados se llevarán información macroeconómica y financiera y discutirán con los funcionarios sobre el desarrollo de la economía local y sobre distintas políticas. Las principales oficinas en las que se sentarán Cardarelli y su equipo de economistas en la primera de sus dos semanas de estadía serán las de Hacienda, Finanzas, Interior, Producción y el Banco Central. Por otra parte, habrá reuniones con economistas, empresarios y académicos. Durante las siguientes dos o tres semanas el staff elaborará el informe que será considerado por el Directorio del Fondo Monetario entre 6 y 8 semanas luego de terminada la visita, por lo que el informe podría ser publicado entonces en los últimos días del año.
De acuerdo a los últimos estudios hechos por el organismo, tanto a nivel global, regional y el reporte del Artículo IV del año pasado, el FMI considera que las cuestiones más importantes que tendrá que encarar el país serán:
Déficit fiscal: “sería crítico cumplir con el objetivo anunciado de recortar el déficit fiscal federal primario en 2% en 2018/19”.
Gasto público: para el FMI, son necesarios “nuevos recortes de los subsidios generosos y mal focalizados de la energía y en una racionalización del gasto en muchos otros ámbitos, como salarios, bienes y servicios y transferencias discrecionales al sector privado y a las provincias”.
Corregir el tipo de cambio: un menor déficit reduciría tasas reales “y aliviaría las presiones sobre el tipo de cambio, que aún parece estar algo sobrevaluado en términos reales”.
Dependencia externa: “Dadas las importantes necesidades de endeudamiento externo, un endurecimiento exógeno de los mercados mundiales de capital podría ser muy perturbador. En el mejor de los casos, un costo de financiamiento más alto requeriría una corrección fiscal más fuerte en el mediano plazo. En el peor de los casos, una interrupción repentina del endeudamiento podría generar déficit de financiamiento, esto podría requerir un ajuste fiscal más anticipado”.
Flexibilización laboral: sería necesario “dotar de mayor flexibilidad a los mercados laborales, reducir la informalidad, abrir la economía al comercio internacional y mejorar la competencia interna en los mercados”.
Empleo público: “una reducción estructural en el empleo público se facilitaría mediante el fortalecimiento de la gestión de la nómina para rastrear y controlar a los empleados públicos fantasma”.