Con el nuevo ajuste del 3,7% basado en la inflación de marzo, el haber mínimo pasará a ser de casi $300.000, pero sólo con el bono de $70.000 se logra superar la línea de pobreza. A esto se suma la incertidumbre tras el fin de la moratoria previsional
Las jubilaciones y pensiones aumentarán un 3,7% en mayo como consecuencia de la nueva fórmula de movilidad que aplica el Gobierno, basada en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo, recientemente publicado por el INDEC.
El incremento será oficializado en los próximos días por la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), y se trata de una actualización automática, en línea con la inflación del mes antecesor. Esta medida forma parte del nuevo esquema de movilidad jubilatoria implementado por la gestión de Javier Milei.
Cuánto se cobrará con el nuevo ajuste
Con la suba del 3,7%, el haber mínimo para jubilados pasará a ser de $296.396,10, monto que percibe cerca del 65% de los beneficiarios del régimen general. Sin embargo, el monto final será más alto gracias a un bono extraordinario de $70.000, que se seguirá abonando como complemento.
Estos serán los montos definitivos en mayo 2024:
-Jubilación mínima: $296.396,10 + bono de $70.000 = $366.396,10
-Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM): $237.116,8 + bono = $307.116,8
-Pensiones No Contributivas (PNC): $207.477,1 + bono = $277.477,1
Esta será la segunda vez que se aplica la nueva fórmula de actualización mensual basada en el IPC, tras la modificación dispuesta por decreto en abril.
Mayo será el primer mes sin moratoria previsional
El dato no menor es que mayo marcará también un punto de quiebre: será el primer mes sin moratoria previsional desde que venció la Ley 27.705 el pasado 23 de marzo. Esta situación afecta directamente el acceso a la jubilación para quienes no tienen los 30 años de aportes exigidos por el sistema.
Las moratorias fueron históricamente una herramienta para ampliar la cobertura del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA). De hecho, según datos de Anses, el 59% de las jubilaciones y pensiones activas se deben a alguna moratoria, y hacia finales de 2024, cerca del 60% de los nuevos jubilados ingresaron al sistema gracias a estos regímenes especiales.
La Fundación Éforo alertó que las moratorias “fueron una respuesta al proceso de precariedad laboral que ningún gobierno logró revertir”, recordando que el 50% de la economía argentina es informal: “El tema tiene que estar en agenda y requiere del compromiso político y de la sociedad en su conjunto sobre cómo abordar un doble problema: el desfinanciamiento crónico del sistema previsional y la expansión de empleos informales que impiden a las personas jubilarse”.