Sin Leonard pero con un muy encendido Aldridge, los Spurs mataron 114-75 a los Rockets de visitante, y liquidaron la serie 4-2 para pasar a enfrentar nada menos que a Golden State. La serie comienza este domingo, en Oakland
Después del infartante quinto juego, San Antonio Spurs defendió la ventaja obtenida en su casa, y aplastó a Houston Rockets en su visita: fue un monólogo, para imponerse 114-75, liquidar la serie y clasificar a la final de la Conferencia Oeste, donde ya esperaba el invicto Golden State Warriors.
El equipo de Gregg Popovich mandó desde el comienzo, y ya desde el segundo cuarto dominó con parciales de hasta 22 unidades, para irse al descanso de medio tiempo 19 arriba. Bien en defensa, y letal en ofensiva, los Spurs lo liquidaron en la segunda mitad, sin reacción por parte del local.
Ante la ausencia de Kawhi Leonard, quien se encuentra lesionado aunque volvería para las finales de Conferencia, el que la rompió fue LaMarcus Aldridge: muy encendido, registró un double-double de 34 puntos y 12 rebotes, aunque no fue el único de San Antonio en gran nivel.
Pau Gasol, con 10 tantos y 11 rebotes; y Dejounte Murray; con 11 conquistas y 10 tableros, también contabilizaron dos cifras en dos estadísticas, mientras que Jonathon Simmons, con 18 anotaciones; Patty Mills, con 14; y Dany Green, con 10; colaboraron en gran medida con el triunfo.
Por su parte, luego de la histórica actuación en el quinto juego, Manu Ginóbili volvió a completar una gran noche, aunque esta vez sin participaciones tan determinantes. Sí fue clave ingresando desde el banco, muchas veces para jugar de base, manejar las acciones y contagiar. Además, contabilizó 2 puntos, 3 rebotes y 4 asistencias en los 16 minutos que estuvo en cancha.
Por el lado de Houston, la derrota agónica en el AT&T Center al parecer golpeó duro, y los Rockets no pudieron reaccionar en casa. El candidato a MVP, James Harden, estuvo muy seco, y apenas aportó 10 tantos, 3 tableros y 7 pases-gol.
De esta manera, San Antonio vuelve a disputar una final de Conferencia. A la espera de recuperar a Leonard, deberá enfrentar a Golden State en una serie que comienza el domingo en Oakland, donde se desarrollarán los dos primeros juegos, ya que los Warriors tienen la ventaja.